martes, 29 de junio de 2010

Antología de cuentos fantásticos latinoamericanos, 1800-1930 (Ethan Sharp y José M. Martínez)

Ayer me llegaron los ejemplares del libro que he coeditado con un colega y amigo. Se trata de una antología de relatos fantásticos hispanoamericanos, publicados entre 1800 y 1930. Algunos de esos relatos ya han aparecido recogidos en  compilaciones similares, pero otros como "El aura", de Gertrudis Gómez de Avellaneda, "La llama", de  Horacio Quiroga, o "La alucinada" del tan injustamente olvidado José Antonio Ramos Sucre, se recogen por primera vez en esta antología.
        El título viene en inglés porque es un libro publicado en Estados Unidos pensado para las universidades y estudiantes de español de Estados Unidos. Los textos, por supuesto, son los originales en español, y van acompañados de introducción, notas explicativas y glosario en inglés. Un libro de narraciones entretenidas y accesibles y muy útil para clases sobre narrativa corta latinoamericana en general y sobre literatura fantástica en particular. Para más información acerca de los contenidos y la compra del libro ver la página de la editorial; también puede conseguirse en Amazon. (Ethan Sharp, y José M. Martínez: Anthology of Latin American Fantastic Short Stories. Newark: Cervantes & Co, 2010).



SPAN 4392.01

lunes, 28 de junio de 2010

Cervantes y Pasamonte. La réplica cervantina al Quijote de Avellaneda (Alfonso Martín Jiménez)

De la contraportada: "Este estudio da respuesta a uno de los mayores enigmas de la literatura española, explicando que Avellaneda, autor del Quijote apócrifo, fue el soldado aragonés Jerónimo de Pasamonte, un compañero de milicias de Cervantes que, tras participar en la batalla de Lepanto y sufrir un largo cautiverio (...) escribió una autobiografía, Vida y trabajos de Jerónimo de Pasamonte. Cervantes satirizó a Pasamonte en la primera parte del Quijote a través del galeote Ginés de Pasamonte (...) Como respuesta, Pasamonte imitó a su imitador escribiendo el Quijote apócrifo, que firmó con el nombre falso de  Avellaneda. (Alfonso Martín Jiménez: Cervantes y Pasamonte. La réplica cervantina al Quijote de Avellaneda. Madrid: Biblioteca Nueva, 2005, 274 pp.).

domingo, 20 de junio de 2010

Historia del rey transparente (Rosa Montero)

Estaba pensando en darle tres estrellas a esta novela, pero al final creo que se va a quedar con dos. No es que no me haya interesado pero me parece que habría que esperar más de un libro que ganado un par de premios en su género. No se puede negar la riqueza de invención de situaciones y lugares de la narradora, pero tampoco que algunos de ellos, como las huidas del castillo de la Dama Negra o de la última ciudad sitiada son de lo más tópicas y peliculeras. Otras por el contrario, me parecen demasiado breves o desaprovechadas para el peso que quiere dárseles en la narración. Es lo que ocurre  con la estancia de Leola en la corte de Leonor, las disquisiciones sobre el amor cortés, o el debate teológico entre 'buenos y malos'. Tampoco puede negarse la fuerza de una  voz narrativa bien mantenida y la riqueza léxica, pero en el género histórico hay que recordar que el mérito no consiste sólo en recuperar el vocabulario de la época sino -lo que es más difícil- hacer que los personajes hablen en un lenguaje que sea a la vez el de esa época y el de la nuestra. La gloria de don Ramiro, de Enrique Larreta, sigue siendo el ejemplo a imitar. También quedan varios cabos sueltos, o cerrados demasiado artificialmente, como el final de la Dama Negra y su hermanastro, el destino de Gastón, el alquimista, y el desconocido significado del título de la novela, que puede justificarse como juego literario pero no como explicación de la historia.
      Salvo el personaje de Leola y parcialmente el de la Dama Negra, me parece que los demás se han quedado a medio hacer o en meros estereotipos. A Nyneve se le podía haber sacado mucho más jugo. Da la impresión de que la narradora no ha querido ahondar en ella por miedo a desviarnos de Leola o a entrar en terrenos demasiado maravillosos. Al final Nyneve, resulta una especie de Sancho Panza a medio terminar. Pero quizá lo más grave en este sentido es el maniqueísmo del argumento, donde en general los malos son malos y tontos y los buenos son sólo buenos y listos. El nombre de 'Mórbidus' para uno de los malos suena demasiado a cuento de niños. En Leola, el personaje más rico, asoma la ideología de género con sus justas reivindicaciones y también con sus complejos, pero a veces no deja de sorprender su superficialidad. Un ejemplo sería el sentimiento amoroso, que en una novela tan volcada con el amor cortés debería haberse provocado reflexiones mucho más hondas. Para Leola, por el contrario, el amor parece resumirse en el binomio flechazo-cama. Finalmente lo políticamente correcto es tan evidente que a veces el libro parece un tratado doctrinal. Así ocurre en el discurso de Bodel, el regidor rebelde, y el episodio donde Leola y León se convierten en los protectores del grupo que hoy llamaríamos 'minorías'. Obviamente, nada que objetar en el significado ético de este planteamiento, pero creo que un buen novelista debe saber complicar y resolver un poco más sus propios argumentos. En resumen, una novela con ideas y muestras de recursos pero al que le ha faltado una profundidad que podía haberle llevado mucho más lejos.
       Como nota aparte, hay que agradecer a la autora las aclaraciones sobre las libertades que se ha tomado con los datos históricos que maneja, y que aclaran hasta dónde llega la ficción y hasta donde la historia. No indica si ha leído los trabajos de Regine Pernoud y de Jacques Heers, pioneros en la reivindicación de la Edad Media que persigue también la novela, pero no habría estado de más citarlos por su seriedad. Así como algún estudio más profundo acerca de las creencias de los cátaros, mucho más complicadas y polémicas de lo que se presentan aquí. Nada se dice por ejemplo de su costumbre del suicidio por hambre o endura, por considerar este método una forma de liberar el alma de la prisión material del cuerpo. En fin, en este sentido, demasiadas simplificaciones en una novela de quinientas páginas y en un género que debe ser un retrato más redondo de todo lo humano (Rosa Montero: Historia del rey transparente: Madrid: Alfaguara, 2005, 528 pp.).





jueves, 17 de junio de 2010

Rubén Darío. Estudios en el centenario de Los Raros y Prosas Profanas (Ed. Alfonso García Morales)

De la presentación: "En 1996, con motivo del centenario de la publicación en Buenos Aires de la primera edición de Los Raros y Prosas profanas y otros poemas, el Área de Literatura Hispanoamericana de la Facultad de Filología de Sevilla organizó un ciclo de conferencias, cuyo resultado final es este libro (...) Los once artículos que siguen se centran fundamentalmente en estos libros, pero también abarcan  las circunstancias de la etapa argentina de Darío y se extienden sobre aspectos de su evolución  e influencia posterior. (Alfonso García Morales: Rubén Darío. Estudios en el centenario de Los Raros y Prosas Profanas. Sevilla: Secretariado de Publicaciones de la Universidad, 1998, 239 pp.).

miércoles, 16 de junio de 2010

París no se acaba nunca (Enrique Vila-Matas)

Como decía en la entrada pasada, con esta novela he tenido mis más y mis menos. Mis más por su originalidad metaliteraria, pues siempre me han atraído los juegos de este tipo, especialmente en casos como El Quijote de Cervantes o Un drama nuevo de Tamayo y Baus. Pero en principio El Quijote y Un drama nuevo me parecen más atractivos que la metaliteratura más reciente, por estar al servicio del argumento interno de la novela y no tanto enfocada en una especie de egoncentrismo de autor que a veces no se sabe si es pura egolatría o un empleo lúdico e instrumental de lo literario. En el caso de París no se acaba..., su densidad libresca no llega a ahogar la vida del protagonista de la narración, pero hace que éste se mueva al final en un mundo ajeno al común de los mortales, que pocas veces pueden verse identificados o atraídos por sus andanzas. Pero también es cierto que el tono humorístico e irónico que Vila-Matas ha buscado para su novela se mantiene con éxito llegando a momentos de verdadera maestría que disimulan un poco el desencanto y el mundo un poco vacío en que al final se mueven todos los personajes.

       Tengo que reconocer que en su conjunto se trata de una obra de referencia obligada, por la habilidad con que  Vila-Matas mueve ese mundo y el empleo de recursos como esas repeticiones de frases claves, o algunos golpes de humor periódicamente recurrentes, que van muy bien con el título. Como ellos en la  novela, París, la literatura, Hemingway, Duras, no se acaban nunca, son ya parte del imaginario literario universal. Logrado es también el juego acerca del formato o subgénero de la narración: ¿novela? ¿autobiografía? ¿biografía ficticia? ¿conferencia? El estilo es suelto y fluido, pero un léxico un poco más amplio y una ordenación narrativa más lineal y con menos vueltas y revueltas creo que enriquecerían y facilitarían un poco más su lectura.  Para lectores y alumnos que gusten y estén familiarizados con la metaliteratura. A quienes busquen una ficción realista o historias entretenidas les parecerá demasiado libresca, aunque algunas de las anécdotas narradas en ella merecerían ser antologadas en cualquier volumen sobre el género. (Enrique Vila-Matas: París no se acaba nunca. Barcelona: Anagrama, 2003, 233 pp.).




martes, 15 de junio de 2010

Gustavo Adolfo Bécquer: Todas las narraciones (Ed. Ángel Esteban)

De la contraportada: "Las narraciones de Bécquer constituyen  un legado de primer orden a la literatura española posterior. Basadas casi siempre en leyendas medievales o historias de la tradición cultural hispánica, destacan por la maestría con que se consigue sembrar el misterio, la duda e incluso el miedo en los lectores. Tanto las historias reelaboradas como los argumentos originales coniguen atrapar desde las primeras líneas a aquellos que, llevados por el escepticismo racionalista, tratan de escapar, sin conseguirlo, del universo sobrecogedor al que el poeta les somete con indudable habilidad" (Gustavo Adolfo Bécquer: Todas las narraciones [Ed. Ángel Esteban]. Palencia: Cálamo, 2007, 459 pp.).

lunes, 14 de junio de 2010

La musas soplan cuando quieren

Actualmente estoy leyendo París no se acaba nunca, de Enrique Vila-Matas, novela con la que estoy teniendo mis más y mis menos. Entre los más, esta cita acerca de las sorpresas del propio escritor durante el proceso de escritura: "Cuando me preguntan si los textos los tengo organizados en la cabeza antes de escribirlos o bien se desarrollan sorprendiéndome a mí mismo  a medida que avanzan, siempre contesto que en la redacción se producen sorpresas infinitas. Y que por suerte es así, porque la sorpresa, el sesgo repentino, la frase que se presenta en el momento preciso sin que se sepa de dónde viene, son el dividendo inesperado, el fantástico empujoncito que mantiene activo a un escritor." (Enrique Vila-Matás: París no se acaba nunca. Barcelona: Anagrama, 2003, pp. 160-161).

jueves, 10 de junio de 2010

Amado Nervo: El libro que la vida no me dejó escribir (Coord. Gustavo Jiménez Aguirre)

De la contraportada: "La presente antología nos acerca tanto a los poemas de Nervo como a sus ensayos, crónicas, aforismos, cuentos y novelas breves (...) Además, el volumen ofrece  textos autobiográficos y epistolares, algunos inéditos, (...)  y una valoración actual, sustentada en la selección, el estudio preliminar y los tres ensayos de especialistas en la poesía, la crónica y la narrativa de una de las plumas más leídas de nuestro continente (...) Los compiladores y ensayistas (...) ofrecen lecturas e interpretaciones amenas y novedosas, sustentadas en la pasión literaria y en el rigor historiográfico que convocan aquellos contemporáneos de un pasado indiscernible del México actual" (Amado Nervo: El libro que la vida no me dejó escribir. Coord. Gustavo Jiménez Aguirre. Fondo de Cultura Económica/UNAM, 2006, 561 pp.).

miércoles, 9 de junio de 2010

Abuelas, madres, hijas, nietas

Por curiosa coincidencia, las tres últimas novelas comentadas en este blog tienen a una o varias mujeres como principales protagonistas. Además las tres  están organizadas en torno al triángulo/cuadrángulo abuela-madre-hija-nieta, aunque las ópticas de cada una de ellas es también muy diferente. La relación más optimista y divertida es obviamente la formada por Sara Allen y Gloria Star, de Caperucita en Manhattan.

Cito unas palabras del relato de Martín Gaite, que serían imposibles en boca de Elena, la protagonista de
La soledad era esto, y muy difíciles pero quizá no imposibles en Virginia o Amadora, de La fiebre amarilla. Habla Miss Lunatic, la amiga tan especial de Sara: "Pero ¿a qué llaman vivir? Para mí vivir es  no tener prisa, contemplar las cosas, prestar oído a las cuitas ajenas, sentir curiosidad y compasión, no decir mentiras, compartir con los vivos un vaso de vino o un trozo de pan, acordarse con orgullo de la lección de los muertos..." Podría ser una buena receta para el vacío de Elena.

Otra interesante entrada del blog sobre Martín Gaite, los feminismos y las mujeres en general aquí

martes, 8 de junio de 2010

Alberto Acereda y Rigoberto Guevara: Modernism, Rubén Darío, and the Poetics of Despair

Este trabajo es un estudio detallado de una faceta relgada de la obra de Rubén Darío, y en general de todo el Modernismo, como es el conjunto de inquietudes metafísicas y existenciales que anticipan la literatura posterior. Los autores analizan los temas de la vida y la muerte en las obras de Darío, especialmente en su poesía, y muestran cómo Darío realmente es quien da los primeros pasos hacia la modernidad poética. El componente tragico de la obra dariana es estudiado a la luz de la filosofía del XIX, con especial atención a la presencia de A. Schopenhauer (Alberto Acereda y Rigoberto Guevara: Modernism, Rubén Darío, and the Poetics of Despair: Lanham, University Press of America, 2004, 358 pp.).

lunes, 7 de junio de 2010

Caperucita en Manhattan (Carmen Martín Gaite)

Esta novela-recreación del cuento de Caperucita apareció en la colección "Las tres edades" de la editorial Siruela, y realmente puede llegar y convencer a todos esos públicos, aunque quizá sea un poco exagerado por parte de la editorial pensar que también es un libro para lectores de 'ocho años'.

   Martín Gaite lleva a cabo una versión a  la vez respetuosa, moderna, divertida y libre del cuento de Perrault, para conseguir al final un relato fácil de leer, con una moraleja que no es moralina y unos simbolismos fáciles de descifrar pero al mismo tiempo vivos y originales. Quizá lo que más me ha gustado ha sido el empleo de todo ese material para  cuestionar el sentido de vida y de libertad que se tiene en la urbe moderna o en el mundo mecánico de hoy.  La pequeña Sara y Miss Lunatic, sus diálogos y acciones en medio de Manhattan, son como un balón de oxígeno entre tanto edificio de hormigón y tanto dinero de papel.

     Es cierto que a veces la edad de Sara y algunos parlamentos de Miss Lunatic pueden parecer un poco forzados, pero creo que esto sólo ocurre en contadas ocasiones. También a algún lector le puede parecer
que se dejan varios cabos sueltos, pero todo ello queda oculto entre tantos otros aciertos, muchos de ellos además con un fino sentido del humor y entretenidos juegos intertextuales. Los aficionados a la literatura fantástica también podrán disfrutar de varios pasajes donde se rompen las leyes del tiempo, o las de la identidad.... Un libro para todas las edades (bueno, no para los más pequeños), en un castellano también asequible a la inmensa mayoría.  Una lectura segura para alguna de mis próximas clases. (Carmen Martín Gaite: Caperucita en Manhattan. Madrid: Siruela, 1990, 205 pp.).



(SPAN 2307/8)

sábado, 5 de junio de 2010

El último baluarte del Imperio (Margarita Rojas)

De la introducción: "El primer capítulo trata del discurso 'inaugural' de la crítica antimodernista que, paradojlamente, es y no es antimodernista. Se trata del prólogo  del conocido crítico español Juan Valera, quien, si bien no lo fue en realidad, pasó a las historias de las literaturas como el primero en la larga lista de críticos darianos.

A partir del segundo capítulo se analizarán los que se descubrieron como los más importantes nudos semántico-ideológicos de la crítica antimodernista: el problema de la lengua, la existencia del continente americano para el crítico español como el problema del Otro, la galofobia, el nacionalismo. La actitud antisimbólica, es decir, la concepción de la literatura coo representación o reflejo de algo exterior. Estos son los núcleos de un discurso complejo que  se trenza profundamente con la literatura. (Margarita Rojas  González: El último baluarte del Imperio. San José: Editorial Costa Rica, 1995, 244 pp.).

viernes, 4 de junio de 2010

Una armonía de caprichos. El discurso de respuesta en la prosa de Rubén Darío (Francisco Solares-Larrave)

Mediante una lectura política y cultural de las principales obras de Rubén Darío, el autor articula una innovadora visión del modernismo latinoamericano como respuesta cultural a Europa. Al contrario que otros análisis, que comentan las obras abiertamente políticas de Darío, en este caso se busca sobre todo el contenido político menos evidente pero real, que aparece en la prosa lliteraria y artística del nicaragüense. Al final, el libro confirma una imagen opuesta a la tradicional, que hacía de Darío un escritor opaco a las circunstancias sociales y políticas de su tiempo, y cuya obra se calificaba de escapista y libresca. (Francisco Solares-Larrave: Una armonía de caprichos. El discurso de respuesta en la prosa de Rubén Darío. Chapel Hill: The University of North Carolina Press, 2007, 169 pp.).

jueves, 3 de junio de 2010

Rubén Darío (Julio Ortega)

De una de las solapas: "En este libro la biografía se convierte en "biolectura" porque la vida de Rubén Darío se entiende mejor en el diálogo desencadenado por su nueva poética. Esta nueva interpretación del gran renovador de la poesía moderna en lengua española, parte de las lecturas críticas y poéticas que ha convocado. De este modo, nos revela la imagen de Darío en la mirada de sus críticos y amigos, pero también en la mirada que el poeta les devolvió en cartas y poemas. Y postula que la vida del poeta está en ese ámbito de intimidad y empatía. En ese diálogo visionario donde Unamuno, Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez, entre muchos otros, representan un Darío más cierto y más pleno, el poeta se transfigura cifrado y descifrado en la pasión de lo vivo y la gracia poética." (Julio Ortega: Rubén Darío. Barcelona: Omega: 2003, 264 pp.).

miércoles, 2 de junio de 2010

José Asunción Silva: Poesías (Ed. Rocío Oviedo Pérez de Tudela)

Para esta edición de la obra lírica de José Asunción Silva se ha tomado como base la coordinada por Héctor Orjuela para "la colección Archivos, por su exhaustivo  estudio de la obra y cotejo de fuentes." Aquí "no se incluyen todos los poemas de Intimidades por varios motivos" pero sí una selección de los más interesantes, así como los poemas completos de El libro de versos, Gotas amargas y las Poesías varias. (José Asunción Silva: Poesías. Madrid: Clásicos Castalia. Ed. Rocío Oviedo Pérez de Tudela, 1997, 265 pp.).

martes, 1 de junio de 2010

La fiebre amarilla (Luisa Castro)

La fiebre amarilla es una cautivadora narración organizada en torno a una serie de vidas que se presentan como incompletas y que, poco a poco, en un argumento bien llevado y mantenido, acaban resolviéndose en un final a la vez fantástico o semifantástico y también muy humano. El argumento se desarrolla por medio de varios saltos en el tiempo, que a pesar de su frecuencia no acaban produciendo cansancio ni confusión, aunque sí pueden requerir una lectura más atenta de lo normal. Quizá el éxito de esta estrategia se deba a la presencia de personajes con los que el lector se ha familiarizado fácilmente desde el comienzo. En este sentido se trata de una trama relativamente sencilla y asequible. Los leit-motivs del viaje, las caídas y las visitas a las casas y habitaciones de la(s) mujeres configuran también un cimiento sólido a una narración a la que no se le ve ninguna fractura. Memorables son especialmente las escenas del delirio de Virgina, donde sugestión, fantasía y realismo se entrecruzan de forma a la vez dramática y contenida, sin excesos.

      Esta mesura y falta de crudezas se extiende por todo el libro y es algo que también hay que agradecer a la autora, en una narración que en otras manos seguramente hubiera discurrido por caminos mucho más estridentes. 
Quizá se le pueda reprochar que no haya aprovechado algún momento de la historia para reflexión sobre algún tema de índole más general, pues aparecen temas muy adecuados para ello y así hubiera conseguido dar más vuelos de universalidad a un argumento que tan bien se presta para esto. El lenguaje es el propio de una poeta como Luisa Castro, seguro, sólido, transparente y con abundantes frases y expresiones felices y rotundas. Una novela apropiada para alumnos con un conocimiento medio del castellano pero a los que en algún momento habrá que ayudarles a entender la organización del argumento.  (Luisa Castro: La fiebre amarilla. Barcelona: Anagrama, 1994, 177 pp.).


Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...